Estacionaron en pleno centro para merendar y cuando regresaron, les habían robado casi todo.
La indignación de Aldana se hizo patente en una frase tajante: “No volvemos nunca más”. Es que la experiencia que tuvieron los viajeros en la ciudad de San Luis fue calamitosa: en solo tres horas de permanencia, les desvalijaron la casa rodante motorizada en la que venían viajando desde Buenos Aires.
La intención para los próximos días era conocer diferentes localidades, pero el azote de la inseguridad los obligó a volantear y emprender el retorno a su localidad, en la provincia de Buenos Aires. Antes habían pasado por Mendoza.
Ayer, cuando llegaron a la capital puntana, estacionaron su vehículo en Pedernera, entre Hipólito Yrigoyen y Maipú, a escasas cuatro cuadras de la plaza Pringles. Caminaron por el centro y decidieron tomar un café, para luego buscar alojamiento.
Pero cuando regresaron a su hogar móvil, apenas dos horas después de estacionar, vieron que la ventanilla de la puerta lateral había sido violentada y del interior del vehículo se habían llevado una heladera, el equipaje de la familia, integrada por Aldana, Julián y el hijo de ambos, Thiago, y un dron con el que los viajeros registraban sus viajes. “Perdimos todo. Encima la heladera les va a servir, porque funciona a 12 voltios”, explicó la mujer.
Aldana también subrayó el destrato de la Policía a la hora de asentar la denuncia. “Encima que uno es víctima, la Policía nos trata como culpables. Hicimos la denuncia en Comisaría 1, pero nos dijeron que después teníamos que volver para ratificarla. No volveremos nunca más”, dijo.
Por último, la mujer agregó que los vecinos de la zona le mencionaron que en la cuadra viven zozobra por los hechos de inseguridad repetidos. “Nos habían dicho que San Luis no era el mismo de antes. No pudimos conocer nada. Los vecinos también nos dijeron que ellos viven con miedo”.
