El comienzo del juicio por el crimen de Romina Aguilar, que estaba previsto para este martes a las 9.30, fue suspendido.
La medida se tomó en función porque “no estaban listas todas las pruebas”, reveló el abogado Jorge Sosa, defensor de Cristian Leandro Vilchez, uno de los imputados como autor material del crimen.
Romina, esposa del ex intendente de La Calera, Diego Lorenzetti, fue asesinada en la puerta de su casa del barrio FAECAP de la ciudad de San Luis, el 30 de enero del 2016.
Audios de llamadas intervenidas, mensajes de WhatsApp y la determinación de los lugares de activación de los celulares son las pruebas que faltan completar para poder determinar la responsabilidad o no de los imputados en el crimen.
“Yo pedí el sistema para determinar el lugar exacto, las celdas, donde saltaron los celulares. Las pruebas se ofrecieron hace poco. Me interesa saber dónde impactó el celular de mi cliente un par de horas antes y un par de horas después (del hecho)”, explicó Sosa.
Para el próximo viernes, fecha estipulada para la audiencia, tampoco estará lista esa prueba, pero el abogado adelantó que estará presente un perito que oficiará de “intermediario” para “que se produzca esa prueba, que tiene que ser en San Juan o en Buenos Aires”.
Sosa remarcó que en las escuchas no se puede determinar la participación de su cliente en el homicidio, y que su vinculación con el caso – al igual que la de Lorenzetti – se produjo solo por la confesión de Edivaldo de Oliveira Pereira, el brasileño que se adjudicó para los tres la autoría del crimen.
“Espero que el brasileño declare. La investigación se basa en el relato que el brasilero hizo bajo torturas. Espero que diga todo lo que ocurrió”, sentenció.
San Luis 24